Si te tomas la molestia de echar un vistazo más de cerca a la parte posterior del envase al comprar comida para perros, encontrarás una serie de información. Junto con los detalles sobre la composición del alimento para perros, también se incluyen datos como proteínas crudas, grasas crudas y fibras crudas.
A continuación, conocerás qué significan exactamente estos términos y si dicen algo sobre la calidad del alimento.
En Alemania, existe una obligación legal de imprimir cierta información en el envase de alimentos para perros. Esto incluye, en particular, los ingredientes contenidos en el alimento, los aditivos nutricionales y los denominados componentes analíticos.
Entre los componentes analíticos del alimento para perros se encuentran, por ejemplo, las proteínas crudas, las fibras crudas y las grasas crudas. Se expresan en porcentaje y se determinan mediante un análisis de laboratorio.
El término proteínas crudas se refiere al contenido de proteínas en el alimento para perros. En el análisis no se hace una distinción entre las fuentes de proteínas. Por lo tanto, las proteínas crudas incluyen no solo las proteínas de la carne contenida en el alimento, sino también las proteínas vegetales, como las provenientes del trigo.
Las fibras crudas son fibras insolubles en el alimento para perros. Esto incluye, por ejemplo, la pulpa de remolacha seca y la inulina. Aunque los perros son semi-carnívoros y necesitan una cantidad suficiente de grasas y proteínas animales, estas fibras son muy importantes para estimular la motilidad del estómago y los intestinos y promover una digestión saludable.
Las grasas crudas incluyen todas las grasas contenidas en el alimento para perros. Esto incluye tanto grasas vegetales, como aceites, como grasas animales, como la grasa de pollo.
Además de los valores mencionados, en el laboratorio también se determinan las llamadas cenizas crudas. Para ello, el alimento para perros se calienta tanto que se quema. Lo que queda son los componentes no combustibles. La mayor parte de las cenizas crudas consiste en minerales.
El contenido de humedad indica la cantidad de humedad presente en el alimento para perros. En el caso del alimento seco, este valor es lógicamente mucho menor que en el caso del alimento húmedo, lo que también debe tenerse en cuenta en cuanto a la provisión de agua para beber.
Un alimento completo como nuestra comida seca y húmeda debe proporcionar a un perro todos los nutrientes esenciales en la cantidad adecuada. Además de cosas obvias como proteínas, carbohidratos y grasas, también se incluyen vitaminas y minerales específicos, como vitamina D, taurina, cobre o hierro.
La falta de estos llamados micronutrientes puede tener consecuencias fatales para la salud. Para evitar esto y garantizar un suministro adecuado, se añaden al alimento las vitaminas y minerales necesarios.
Estos se enumeran en el envase como aditivos nutricionales. Las cantidades se indican en unidades internacionales (UI) o miligramos por kilogramo de alimento, dependiendo del micronutriente.
La indicación de los componentes analíticos es obligatoria y te proporciona una visión general aproximada de los valores nutricionales como propietario. Sin embargo, no se puede inferir la calidad del alimento para perros basándose en las proteínas crudas, fibras crudas y grasas crudas.
Por ejemplo, las proteínas crudas pueden provenir tanto de los cereales como de la carne o los insectos. Por lo general, las proteínas vegetales son mucho menos utilizables por tu perro que las animales. Por lo tanto, no solo el contenido de proteínas crudas, sino también el tipo de fuentes de proteínas contenidas, desempeñan un papel importante en el suministro de proteínas a tu perro.
Lo mismo ocurre con las grasas crudas, que pueden ser aceites vegetales de baja calidad o grasas de alta calidad y muy importantes para la salud de tu perro.
Los valores individuales de proteínas crudas, fibras crudas y grasas crudas en el alimento para perros pueden variar considerablemente. Esto se debe, entre otras cosas, a que los perros tienen necesidades muy diferentes según su edad y circunstancias de vida.
Por ejemplo, un cachorro en crecimiento o una perra gestante necesitan más energía y proteínas que un perro adulto. Los perros deportivos y de servicio necesitan nutrientes diferentes a los perros de compañía que viven en apartamentos.
En general, las razas pequeñas de perros tienen un metabolismo energético más alto que las razas grandes. Por lo tanto, su comida debe contener más proteínas y grasas, lo que también se refleja en valores más altos de grasas crudas y proteínas crudas en el alimento para perros.
Para la salud y el bienestar de tu perro, es muy importante que elijas el alimento adecuado. Dada la gran cantidad de factores que influyen en las necesidades de tu mascota, elegir el alimento para perros adecuado puede ser todo un desafío.
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Como puedes ver, vale la pena echar un vistazo más de cerca a la parte posterior del envase al comprar comida para perros. Además de la información sobre los componentes analíticos como proteínas crudas, fibras crudas y grasas crudas, también encontrarás detalles sobre la composición del alimento para perros.
De esta manera, puedes averiguar fácilmente si el alimento que eliges cumple con lo que promete y si los ingredientes de alta calidad realmente garantizan una buena calidad y digestibilidad.
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