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Al igual que los humanos, los perros también pueden sufrir diversos problemas físicos, como una hernia discal, enfermedades articulares o lesiones. Una visita al fisioterapeuta puede ser extremadamente útil con los perros afectados en este caso y puede contribuir de forma decisiva a aliviar las dolencias del amigo de cuatro patas.
A continuación se explica cuándo debe considerar la fisioterapia para su perro y qué opciones hay disponibles.
La fisioterapia es un método de tratamiento conservador que pretende contrarrestar los síntomas existentes mediante ejercicios específicos u otras formas de tratamiento.
La fisioterapia puede utilizarse, por ejemplo, para fortalecer los músculos, mejorar la movilidad o contrarrestar el dolor existente en los perros.
A menudo se habla de fisioterapia. El procedimiento exacto que utiliza el fisioterapeuta depende, por supuesto, del estado de salud del perro y del objetivo del tratamiento.
Al igual que en el caso de los humanos, las citas con un fisioterapeuta pueden ser útiles para los perros por diversas razones. Por supuesto, la atención se centra principalmente en diversas enfermedades del sistema musculoesquelético, cuyas consecuencias a menudo pueden contrarrestarse bastante bien en los perros afectados con una fisioterapia regular.
Aparte de esto, la fisioterapia para perros también puede formar parte de la terapia contra el dolor o de las medidas de tratamiento tras una operación, por ejemplo. Además, puede ayudar a mantener o mejorar la movilidad en animales viejos o especialmente activos físicamente.
La fisioterapia es extremadamente versátil. No sólo consiste en simples ejercicios de gimnasia y masajes, sino que también puede incluir otros métodos de tratamiento.
Se distingue entre fisioterapia activa y pasiva. La fisioterapia activa se refiere a aquellos métodos en los que el animal participa activamente. Esto incluye, por ejemplo, el entrenamiento en una cinta de correr.
La fisioterapia pasiva, en cambio, se refiere a los métodos de tratamiento en los que el amigo de cuatro patas permanece pasivo. Esto incluye, por ejemplo, masajes o tratamientos térmicos.
Dependiendo de las dolencias existentes y del objetivo del tratamiento, los métodos de fisioterapia activa y pasiva pueden, por supuesto, combinarse entre sí para garantizar el mejor progreso posible.
La fisioterapia es un componente muy importante del tratamiento en muchos casos. Sin embargo, esto no significa que un fisioterapeuta pueda hacer milagros. Por ello, según el tipo y la gravedad de la enfermedad o la lesión, no siempre está garantizada la recuperación completa del perro a pesar de la fisioterapia regular.
Sin embargo, es indispensable en muchos casos para aliviar en lo posible las dolencias existentes y, por ejemplo, para mantener la calidad de vida de los perros con enfermedades articulares crónicas.
Según el tipo y la gravedad de las dolencias, a menudo no basta con limitarse a unas pocas citas con el fisioterapeuta. En muchos casos, también es importante hacer algo con su amigo de cuatro patas en casa.
En este caso, el fisioterapeuta le mostrará ejercicios apropiados que puede hacer usted mismo con su perro y, por supuesto, también le explicará a qué tiene que prestar atención.
Los costes de la fisioterapia para su perro pueden variar según los métodos utilizados y la duración del tratamiento. Por regla general, deberá pagar entre 30 y 60 euros por sesión, que puede durar entre 15 y 60 minutos.
Si ha contratado la tarifa correspondiente en una póliza de seguro médico para su amigo de cuatro patas, puede hacer que se le reembolsen los gastos de fisioterapia, al menos parcialmente, para no tener que pagarlos por completo.
Normalmente, no hay que esperar que la fisioterapia pueda dañar a su perro de alguna manera y que se produzcan efectos secundarios más graves. Por supuesto, esto sólo es válido mientras el fisioterapeuta sepa lo que hace y adapte el programa de entrenamiento de forma individual a la condición física de su paciente de cuatro patas.
La funcionalidad del sistema musculoesquelético es crucial para el bienestar de su perro. Los problemas en las articulaciones pueden restringir enormemente la calidad de vida de su amigo de cuatro patas y estar asociados a un dolor extremadamente intenso.
Por esta razón, a menudo tiene sentido proporcionar a las articulaciones del perro nutrientes adicionales en forma de complemento alimenticio. Para ello recomendamos Bellfor Articulaciones & Huesos.
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La administración de Bellfor Articulaciones & Huesos puede ayudar a suministrar de forma óptima los nutrientes a las articulaciones, entre otras cosas, en perros deportistas y de servicio especialmente activos o en razas de perros con una mayor tendencia a los problemas articulares. Además de las cápsulas, Bellfor Articulaciones & Huesos también está disponible en forma de sabrosas golosinas para perros sin cereales.
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Como puede ver, la fisioterapia puede ayudar a los perros en muchos casos. El entrenamiento regular por parte de un especialista puede contribuir de forma decisiva a minimizar las consecuencias de las enfermedades articulares existentes o también a favorecer la recuperación tras lesiones u operaciones. Los métodos disponibles para ello son casi tan variados como para los humanos.
Si su veterinario le recomienda la fisioterapia para su perro, no debe dudar por el bien de su amigo de cuatro patas y empezar a buscar rápidamente un terapeuta con experiencia en su zona.
