La alimentación cruda (BARF) está ganando cada vez más popularidad entre los propietarios de perros que prefieren un enfoque de alimentación más natural para sus mascotas. Muchos propietarios de perros están convencidos de que este método de alimentación puede ser especialmente beneficioso para los cachorros, ya que se basa en ingredientes frescos y sin procesar que pueden proporcionar una variedad de nutrientes esenciales. A continuación, exploraremos las ventajas, daremos consejos y explicaremos los fundamentos nutricionales para la alimentación cruda de cachorros.
¿De dónde proviene el término BARF? La canadiense Debbie Tripp acuñó el término BARF tanto para referirse a un dueño de perros que alimenta a sus mascotas según este método de alimentación, como para el tipo de alimento en sí mismo. A lo largo de los años, el significado del acrónimo BARF ha cambiado: inicialmente significaba "Born-Again Raw Feeders", lo que subraya el componente ideológico de este método de alimentación, y evolucionó hacia "Bones And Raw Foods" (huesos y alimentos crudos). El término adquirió una nueva dimensión con el libro publicado en 1993 por el veterinario australiano Ian Billinghurst, "Give Your Dog A Bone", que redefinió el acrónimo como "Biologically Appropriate Raw Food". En alemán, esto se traduce como "Alimento crudo biológicamente apropiado" o "Alimentación cruda biológicamente apropiada".
Entonces, el BARF es un método de alimentación desarrollado principalmente para mascotas carnívoras. El concepto se basa en las preferencias alimentarias de los perros salvajes, especialmente los lobos, y consiste en una mezcla de carne fresca, vísceras, huesos y pescado. Este alimento se sirve crudo y se complementa con la adición de frutas, verduras y ocasionalmente productos de cereales y suplementos alimenticios. La correcta composición requiere conocimientos en ciencia de los alimentos y nutrición animal. El BARF no se limita exclusivamente a los perros, sino que también se aplica a gatos y hurones.
Dado que los cachorros atraviesan una fase de rápido crecimiento y desarrollo, la ingesta diaria de todos los nutrientes esenciales es crucial. A diferencia de los perros adultos, no pueden regular esto y, por lo tanto, necesitan un suministro equilibrado de todos los nutrientes a diario. Los cachorros tienen necesidades específicas de macronutrientes, incluida una mayor necesidad de grasa, vitaminas, minerales y aminoácidos en comparación con los perros adultos.
El suministro adecuado de vitaminas y minerales esenciales como yodo, cobre, zinc, fósforo y calcio es imprescindible, especialmente porque el fósforo y el calcio juegan un papel importante en el desarrollo óseo. El fósforo es importante para el metabolismo energético y el equilibrio ácido-base y se encuentra principalmente en carne cruda. Por otro lado, el calcio es crucial para los músculos, los nervios y la coagulación sanguínea y se encuentra, por ejemplo, en huesos o cáscaras de huevo.
El equilibrio adecuado entre calcio y fósforo es esencial para garantizar un desarrollo óseo y dental saludable. No solo es importante tener en cuenta la cantidad adecuada y la relación entre el calcio y el fósforo, sino también asegurarse de que el cachorro esté continuamente y, idealmente, diariamente, recibiendo los nutrientes adecuados.
La cantidad de alimento para cachorros depende de su edad, nivel de actividad, raza y metabolismo del cachorro.
El cuidadoso seguimiento de estas etapas y consejos ayuda a cambiar con éxito y de manera segura a los cachorros a la alimentación cruda, promoviendo un desarrollo saludable y un sistema inmunológico fuerte.
Según la Consejo Científico Europeo para Parásitos de Animales de Compañía (ESCCAP), existe la posibilidad de que los perros ingieran parásitos al comer carne cruda. Para minimizar el riesgo de infección parasitaria y eliminar posibles parásitos, es necesario congelar adecuadamente la carne antes de alimentarla: debe congelarse durante al menos una semana a temperaturas entre -17 y -20 grados Celsius. Se debe tener especial cuidado al preparar la carne cruda, ya que también representa un riesgo de contaminación con salmonela, que puede causar intoxicación por salmonela.
Es importante tener en cuenta que la carne de cerdo o de jabalí no debe alimentarse cruda a las mascotas bajo ninguna circunstancia, incluso después de congelarla. La razón de esto es que ciertos parásitos, como los triquinos, se alojan en la carne muscular de los cerdos y pueden causar infección en la mascota.
Para cachorros, hemos desarrollado una variedad de productos que respaldan la alimentación adecuada de su pequeño amigo de cuatro patas de manera especialmente digestible. Además de alimentos secos y húmedos de alta calidad, ofrecemos numerosos suplementos alimenticios y bocadillos para cachorros. Nos centramos en un alto contenido de carne y utilizamos ingredientes naturales, la mayoría de los cuales se obtienen de los alrededores de Münsterland. Todos nuestros ingredientes se compran exclusivamente a distribuidores de alimentos para animales certificados por GMP y regionales. Nuestra comida está libre de contaminantes y se caracteriza por un alto contenido de prebióticos y ácidos grasos omega-3. El cuidadoso procesamiento garantiza que los minerales y las vitaminas se conserven de la mejor manera posible.
En lugar de cereales, utilizamos alternativas como batatas, papas o verduras para proporcionar carbohidratos esenciales, fibra, vitaminas y minerales. Especialmente las batatas son preferidas para nuestra comida para cachorros sin cereales debido a su alto contenido de minerales y vitaminas. Gracias a su almidón complejo, aseguran un aumento moderado del azúcar en sangre y evitan una sobrecarga del joven organismo.